Podría extenderse curso en la UBA

En noviembre concluyó la primera edición del curso 'Producción y realización televisiva' en la sede de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Desarrollado como parte de las actividades de extensión universitaria y organizado en 12 clases semanales, el programa se dividió en cinco unidades didácticas: análisis y teoría; preproducción y organización; estudio y control de TV; elementos prácticos de realización y producción; logística de trabajo y ejercicios finales.

Los docentes a cargo del curso fueron Nicolás Di Giusto y Lorena Riposati, ambos con una prolongada experiencia en la producción tanto televisiva como cinematográfica. En conjunto, incluso, dirigieron el documental “Mosconi”, que narra la historia de un movimiento de trabajadores desocupados en esa ciudad de la provincia de Salta. Y además, desde hace varios años, se dedican a la docencia en diferentes universidades e institutos terciarios privados de Buenos Aires.

“El trabajar en ámbitos públicos nos da la posibilidad de manejar un arancel acorde a las posibilidades de mayor cantidad de gente”, dijo Di Giusto sobre la experiencia en su relación con la UBA. De hecho, el entrevistado subrayó que el costo del curso completo es, comparativamente, idéntico al de una cuota mensual en la mayoría de las instituciones privadas. Sin embargo, aunque la convocatoria estuvo abierta a la comunidad, en esta primera edición todos los inscriptos fueron alumnos o exalumnos de la universidad que buscaban complementar su formación con este taller.

Además de abrir el acceso a su base de datos para el envío de invitaciones, la UBA cedió el aula para las clases teóricas y su estudio y control de TV totalmente equipados para las prácticas. El estudio cuenta con dos cámaras Sony HD1000 con Dolly y trípode Manfrotto 055XDB (cabezales 701HDV con dos manillares); dos controles de manillar para cámaras Vivitar RC800; dos micrófonos corbateros Magneto Sonora MSD16/PR y uno direccional Audio-Technica AT897; y parrilla de luces con cuatro Fresnels Vulcano (dos de 650 W y dos de 1000 W), dos PowerFlo de cuatro lámparas de 55 W cálidas y dos Soft Light de 1000 W. En tanto, el control posee un switcher Sony BVS-3100P; y consola de sonido Yamaha MG102C.

Di Giusto sostuvo que, en este sentido, su preocupación principal no es contar con equipos “de última generación”, sino con aquellos que garanticen compatibilidad con su metodología de enseñanza y con la “logística de trabajo” habitual en el medio. Y afirmó que el estudio de la universidad “está muy bien puesto y tiene los elementos necesarios” para tales requerimientos. “Esto permite que los alumnos puedan manejar un switcher, aprender a ser directores o sonidistas con todo lo que eso significa”, añadió.

El objetivo del curso es que los estudiantes logren producir, al final del mismo, un programa periodístico de 15 minutos y una escena de ficción con rotación en los diversos roles que componen un equipo de producción. “Lorena se aboca más a lo que es la investigación, los programas periodísticos y las notas en exteriores, mientras que yo me enfoco más en la realización televisiva”, dijo Di Giusto, acerca de la dinámica con que se manejan las clases entre ambos docentes.

Por último, aunque reconoció que todavía no existen acuerdos con la UBA al respecto, el entrevistado anticipó su intención de reiterar este curso en el futuro, en la misma sede. E incluso complementarlo con otros ciclos más específicos sobre distintos temas o contenidos televisivos.

“La idea es poder hacer otros cursos que tengan más que ver con noticieros, con programas periodísticos o con ficción solamente, donde se trabaje más la parte escenográfica y los alumnos puedan hacer un piloto de 44-46 minutos de artística”, dijo.


Jorge J. Basilago